Formada en el Instituto Escuela, participa en el célebre crucero por el Mediterráneo de 1933. Cursa Filosofía y Letras en la Universidad de Madrid, convirtiéndose en 1935 en el primer miembro de su familia en obtener una licenciatura. De fuertes convicciones republicanas y defensora a ultranza de la educación, dirigirá sus pasos hacia la enseñanza y será depurada y apartada de la docencia tras la Guerra Civil. En 1945, tras hacer prácticas en el Museo Arqueológico de Córdoba, ingresa en el Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos siendo su primer destino provisional el Museo Arqueológico Nacional (MAN).  En 1946 es destinada a los Archivos Histórico y de la Delegación de Hacienda de Segovia, y será directora del Archivo Histórico Provincial de Segovia, primera mujer en ejercer este cargo. Posteriormente lo será del Museo Arqueológico de Toledo hasta 1950, cuando se incorpora al MAN para encargarse de las colecciones de cerámica y vidrio de la Edad Media y Moderna. Su implicación en la reinstalación de las salas tras la Guerra Civil le vale el reconocimiento del Patronato. 

Especialista en cerámica de la Edad Moderna, asiste al Congreso Internacional de Cerámica de Cannes (1955) y, tras recibir la Pensión de Estudios de Graduados Superiores, goza de una estancia en Inglaterra para estudiar en diferentes museos (1959). En 1971 se traslada al Museo del Prado y dos años después al Museo del Pueblo Español, hasta su jubilación en 1982.  

Presidenta de la Asociación de Mujeres Universitarias (AEMU), asiste como Delegada al Council of the International Federation of University Women (Atenas 1964). Colaboró también con la Fundación Politeia, creada en 1969 por Jorgina Gil-Delgado Heredia. 

Autora: Margarita Moreno Conde