Licenciada en Farmacia en la Universidad Central de Madrid (1940), ese mismo año empieza a dar clases como profesora ayudante en la Facultad de Farmacia de Madrid. En 1946 acaba la licenciatura de Ciencias Naturales y en 1952 recibe el Premio Extraordinario por su Doctorado en Ciencias Naturales. Josefa – o Josefina – será una de las precursoras de los estudios de palinología y paleobotánica en la península Ibérica, siendo una de sus líneas de investigación los sedimentos de turberas cuaternarias. Su labor docente, que compatibiliza con su trabajo en el Centro Superior de Investigaciones Científicas, continúa a lo largo de toda su carrera en diferentes puestos dentro de la universidad, consiguiendo en 1984, ya muy enferma, la categoría de Catedrática. Dirige más de una treintena de tesis de licenciatura y siete tesis doctorales.

Aún siendo geóloga, colabora frecuentemente con arqueólogos, siempre en compañía de su maestro Frans Florschütz, a su vez discípulos de von Post and Erdtman, con el que había aprendido palinología en el Laboratorio Palinológico de Leiden (Holanda). Juntos analizan los polenes de Torralba (Soria), las terrazas de Villaverde Bajo (Madrid), Ereta del Pedregal (Valencia) y Cueva del Toll (Moia). Su colaboración con arqueólogos continúa hoy a través de su antigua discípula Blanca Ruiz Zapata.

Menéndez Amor participa con frecuencia en congresos y reuniones científicas sobre palinología y cuaternario tanto en España como en Europa. Su aportación científica es muy amplia, habiendo presentado comunicaciones en dichos congresos y publicado artículos en revistas españolas, no sólo científicas sino también sobre información y divulgación.

Autoras: Margarita Díaz-Andreu y Paloma Zarzuela Gutiérrez.