Aunque su formación académica no es específicamente la de Arqueología, ha colaborado en incontables intervenciones arqueológicas. Inició su carrera científica en 1954 en el Departamento de Espeleología creado por el Grupo de Montaña Manuel Iradier (para luego integrarse en el Grupo de Espeleología AET Alava). Su actividad investigadora como espeleóloga se centró en las cuevas alavesas tales como Basotxo, Egino, Atauri, Los Goros, Apodaka y especialmente Mairuelegorreta, una compleja cueva, la segunda cueva más larga de España, aunque también participó en estudios espeleológicos en Navarra, como en la Cueva del Morillo de Urbasa.

Su tarea primordial era la de topografiar las cavidades. Con estas actividades, desarrolló su interés por la prospección y la arqueología, para dedicarse a ella de forma continuada a partir de los años sesenta. Fue una de las fundadoras del Instituto Alavés de Arqueología en el año 1957, institución de la que ha formado parte hasta la actualidad. El año 1960 Nieves, junto con su pareja, el arqueólogo Armando Llanos Ortiz de Landaluze, realizaron importantes descubrimientos de cuevas con arte rupestre, como el de Solacueva de Jokano o la Cueva de Lazaldaien (Zarate).

Nieves participó activamente en todas las campañas de excavación del Castro de Las Peñas de Oro (Valle de Zuia) (años 1964-1966), en la prospección y excavación del Castro del Castillo de Henaio (Alegria-Dulantzi) (años 1968-1970), en el Castro de Berbeia (Barrio) (año 1972), en el poblado de La Hoya (Laguardia) (años 1973-1989), en Solacueva (año 1978) y muy recientemente, entre los años 2010 y 2011 en el poblado de la Edad del Hierro descubierto en Urisolo (Letonia). A su cargo estuvo siempre la organización del trabajo de campo de todas las campañas de excavación dirigidas por Armando Llanos, así como el procesado de los materiales arqueológicos recuperados, especialmente la cerámica. A pesar de su papel en la investigación, al mismo nivel que su pareja, su presencia en las publicaciones, no es la misma, quedando invisibilizada en la mayor parte de los casos. Aunque su nombre no aparece, participó en todas las investigaciones referenciadas en la bibliografía. Actualmente, sigue trabajando en la redacción de la memoria de resultados de todas las campañas de excavación del yacimiento de la Hoya. Durante años ha ocupado el cargo de vicepresidenta en Álava de Eusko Ikaskuntza, Sociedad de Estudios Vascos.

Autoras: Sonia Anibarro y Teresa Campos-López